Tiendo a recargarlo todo, no demasiado, pero creo que con menos mi casa funcionaría mejor. Lo malo es que si dispongo de espacio me cuesta no ocuparlo: no poner un mueble auxiliar para guardar algo, una silla o una cesta.
Esta casa es un buen ejemplo del famoso Menos es más, en ella los muebles están contados. Unas cuantas piezas vintage y unas cuantas piezas modernas amueblan el espacio.
En blanco, negro y gris no hay concesión para más colores, excepto un pequeño permiso a la presencia de la madera y de alguna planta. La selección de objetos y cuadros en las paredes ha sido muy cuidada, parece que aquí nada se ha dejado al azar.
Fuente: Coco Lapine Design