En este apartamento me gusta la aparente falta de intención en la decoración y la dejadez, que le dan un aire de realismo y encanto natural del que carecen los interiores estudiados.
Pared de ladrillo blanco, techo con la estructura vista, constante presencia de plantas.
Se respira naturalidad, las fotos no parece que hayan sido preparadas, el trabajo del estilista, si lo hay, ha sido excelente porque no se intuye su presencia.